Las pequeñas empresas así como los autónomos, por falta de recursos en la mayoría de los casos no pueden dedicar el tiempo requerido para hacer un marketing digital con garantías.
En la mayoria de los casos la estrategia digital se define con Facebook y adwords.
1. Definir los objetivos y KPIs
La definición de objetivos y KPIs es un dato importante. Pensar en qué queremos conseguir y en cuáles serán los indicadores que nos digan si lo estamos haciendo bien o no. Tener una referencia y las métricas correctas es lo que nos permitirá tomar decisiones para corregir las posibles desviaciones.
2. La estrategia debe ir al mismo ritmo que la empresa
La estrategia dependerá del estado de la pyme, si es una empresa de nueva creación, necesitará darse a conocer, Si es una empresa ya consolidada seguramente la fidelización de los clientes será su objetivo.
Por supuesto cualquiera de ellas necesita vender, pero en las primeras fases va a vender poco o nada por un simple hecho: nadie la conoce.
Por eso las empresas que se empeñan en salir al mercado con una web con el proceso de venta equivalente al mejor ecommerce o una herramienta propia para gestionar su comunidad, lo que están haciendo es cargar de costes innecesarios a la empresa en el momento mas critico y aumentando sus posibilidades de fracaso.
Una empresa de reciente creación, lo que necesita es una web que cumpla a la perfección el objetivo de darse a conocer. Por supuesto que permita comprar sus productos/servicios y que tenga las funcionalidades básicas. Pero lo que necesita es una web ‘aceptable’.
3. Conocer a nuestra audiencia
Para vender más y mejor necesitamos conocer bien a nuestra audiencia. Cuanto mejor la conozcamos mejor conoceremos sus necesidades y mejor sabremos atenderlas. Para conseguirlo necesitamos hacer varias cosas, pero voy a destacar las dos que me parecen más importantes:
3.1. Definir el perfil de ‘persona’
Entrecomillo persona, porque es el término que se usa tanto en inglés como en español para definir los perfiles de compradores tipo. Hemos pasado de definir estos perfiles en base a las características socio demográficas, a completarlos con todos aquellos datos que nos permitan conocerlos mejor.
Tener esta información nos permitirá definir estrategias que se adapten lo mejor posible a estos perfiles. Por ello, además de los datos socio demográficos, a este perfil le añadiremos toda aquella información que consideremos necesaria para conocerle mejor y llevar a cabo nuestra estrategia.
Esta información variará en cada caso, pero podríamos poner información relativa a su uso de Internet y el Smartphone, las redes sociales que más usa, el producto de nuestra empresa que mejor le encajaría, los contenidos que más le gustan, que tipo de webs le interesan más,…toda aquella información que nos ayude a definir mejor nuestra estrategia.
Estos datos los podemos sacar de estudios y/o herramientas, pero si no contamos con parte de esta información, simplemente podemos tratar de deducirla. El simple hecho de enfrentarte a un perfil completo y ‘hacerle preguntas’, supone una ayuda increíble a la hora de definir correctamente una estrategia.
3.2. Medir y analizar su comportamiento
Por supuesto la forma que tenemos más a mano es recurrir a los datos que tenemos en ‘casa’. Es decir, obtener datos tanto cuantitativos, como cualitativos que nos ayuden a conocerles mejor.
Estoy hablando de analítica digital. Estoy hablando de herramientas de medición como Google Analytics y de herramientas de encuestas. Obviamente esto que acabo de decir tiene implicaciones profundas, pero no voy a entrar a describirlas por no desviarme ni extenderme demasiado.
Por resumirlo en una frase decir, que necesitamos conocer el proceso de toma de decisión de compra o lo que en marketing digital se llama ‘customerjourney’.
4. Utilizar todos los medios a su alcance
Entender en su totalidad el ‘customerjourney’ nos hará entender que para que nuestra estrategia tenga éxito debemos definir la mejor combinación de los medios a nuestra disposición (pagados, propios y ganados) para llegar a nuestros usuarios.
En otras palabras, deberemos definir la estrategia que mejor se adapte a nuestras necesidades utilizando todos medios a nuestro alcance. Es lo que en marketing se llama la convergencia de medios.
5. Medir y optimizar
Y por último, pero igual o más importante que los puntos anteriores, debemos medir la actividad de nuestra pyme y tomar las decisiones necesarias para optimizar la estrategia planteada.
Esto implica una metodología de medición completa que partiendo de la definición de los objetivos y KPIs inicial, nos permita recoger todos los datos necesarios para tomar decisiones e integrarlos en un cuadro de mando estratégico que nos de la visión global y nos muestre los puntos fuertes (a reforzar), templados (a vigilar) y débiles (a corregir) para tomar esas decisiones tan importantes para el éxito de la estrategia.